El shiatsu es una de las terapias más efectivas para tratar los trastornos del sueño.
Dormir bien y tener un descanso reparador son los principales indicadores de nuestro estado de salud, según la medicina tradicional china.
El insomnio es la dificultad para iniciar o mantener el sueño y puede manifestarse como la dificultad para coger el sueño, despertarse frecuentemente durante la noche o despertarse muy temprano, antes de lo planeado.
En 2006, un estudio mostró que 36 de los 52 pacientes con trastornos del sueño reconocieron obtener una mejoría gracias a sesiones periódicas de shiatsu. De las seis funciones primarias monitorizadas, tres mostraron obtener un efecto notable – la movilidad, el carácter y el sueño (entre un 69% y un 85%).
Generalmente, desde el primer momento, con el primer masaje de shiatsu se consigue mejorar la calidad del sueño. En algunos casos más difíciles, hace falta esperar a recibir más de un tratamiento.
¿Qué es el shiastu?
Shi-dedo, atsu-presión, es una técnica oriental que se basa en la presión con los pulgares, principalmente, y las palmas de las manos que contribuye a activar la capacidad de autoregulación del organismo y a tomar conciencia del estado del propio cuerpo. Se ejerce una suave presión sobre 354 puntos del organismo a través de los meridianos energéticos, presión que se coordina con la respiración del paciente. De este modo se ayuda a equilibrar la energía de cada órgano, liberándolo de los problemas emocionales y del estrés, así como también de los desequilibrios químicos que pueda haber en ellos.
El shiatsu no tiene efectos secundarios, y pueden recibirlo desde niños hasta ancianos, incluso mujeres embarazadas.
Xavier Calvet
Terapeuta de shiatsu y reflexología podal en Accura
Licenciado en biología, especialidad sanitaria
Diplomado en quiromasaje, shiatsu y reflexología podal